jueves, 19 de mayo de 2011

Victoria y sus conejos

Victoria tenia unos 7 años cuando decidió sentarse en su banqueta y mirar los cables de luz que atravesaban el cielo, siempre estaba acompañada por Charli, su perro pastor alemán mas grande que ella.
Un día soleado bailaban en la azotea y pensaban en como seria volar sobre todas esas casas tan parecidas entre ellas, observarían por las ventanas y la gente sin percatarse siquiera de la hora, menos aun se darían cuanta que eran vistos por dos pájaros que volaban sobre ellos en esa tarde de invierno,
ella con sus zapatos de charol y un abrigo verde oscuro, con un moño del mismo color en su cabellera tan negra como el charol de sus zapatos,
su perro un enorme pastor alemán con una cola mas esponjada de lo normal meneándola con felicidad por los aires.

Victoria también sabe cocinar, de vez en cuando, cuando su madre esta ocupada pintando un cuadro nuevo, ella prepara la especialidad; Espagueti a la victoria!..
el que por supuesto es el favorito de su padre, un escritor del simbolismo que no es capas de mantener el drama recluso en las hojas de su escritorio, a el le gusta gritarle a las ventanas "Son unas desconsideradas! como un muerto! que resucita y sale de su tumba con el afán! de vengarse de los que su tumba pisotean! maldita ventana! me machucaste el dedo!!"...y no le da vergüenza.

En las noches invernales tan frías como esa caja donde la madre de victoria guarda las paletas para que estas no se derritan, bajo un farol apartado de los demás como siendo un artista de los postes de luz el cual busca inspiración en la soledad camina victoria con un gis blanco en su mano...un enorme! gis blanco! llega a una amplia banqueta y comienza a dibujar un conejo feliz...después uno triste y termina con uno que sus ojos eran tachas.

Al igual que su padre Victoria escribe historias para sus muñecas de trapo con ojos de botones, las llama "La asamblea de los botones de la abuela"
"muy bien! pongan atención, esta historia es sobre un lindo conejo azul que bailaba y bailaba...este conejo bailaba tanto! que se hiso un experto bailarín...pero nunca el mejor... se preguntaran por que?...jeje pues es muy fácil! nunca fue el mejor bailarín porque se pisaba sus orejas al bailar...pobre conejo... nunca ninguna conejita quiso bailar con el...un día! se le ocurrió una idea para poder ser el mejor bailarín!...saben cual fue su idea?...no?...pues se los diré mañana!"
Era una maestra del suspenso...